La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó la decisión de Donald Trump de imponer aranceles del 25% al acero y aluminio y anunció que su gobierno utilizará el tiempo disponible antes de su entrada en vigor, el 12 de marzo, para negociar con Estados Unidos y evitar la medida.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum destacó que la integración económica de Norteamérica bajo el T-MEC ha generado beneficios mutuos y advirtió que estos impuestos podrían afectar la competitividad regional. “Tenemos que aprovechar este tiempo para dialogar con el gobierno estadounidense y exponer las implicaciones negativas de la medida”, señaló.
Por su parte, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, subrayó que los aranceles contradicen los acuerdos comerciales construidos en los últimos 40 años. Explicó que la industria automotriz depende de insumos que cruzan varias veces la frontera, por lo que el aumento de costos impactaría a las empresas y consumidores de los tres países.
México confía en que el diálogo abierto con el gobierno estadounidense permitirá frenar la medida. Ebrard aseguró que cuentan con información clave para demostrar que las exportaciones mexicanas de acero y aluminio no han crecido de manera irregular y que la cooperación comercial sigue siendo la mejor vía para el desarrollo de la región.